El Código Davinci

LITERATURA
La mezcla de ficción con realidad hacen de esta novela un excelente libro. Dan Brown utiliza una gran cantidad de objetos y lugares conocidos mundialmente y les cambia totalemente el sentido de ser, con el que se los conoce. Sí, así como lo oyen. ¿Por qué la Mona Lisa sonríe? ¿Jesús realmente está con 12 apóstoles en el cuadro La Última Cena de Leonardo Davinci? ¿Llevaron los cuadros de este pintor y las obras de músicos, artístas y poetas famosos mensajes ocultos a través de los siglos? ¿Hasta donde pueden llegar: la fe de un cura, la codicia de una persona y el orgullo del vaticano por mantener sus intituciones y creencias?
Este y otros temas son los que se desarrollan a lo largo de la novela para crear una trama bastante particular. Aquí los dobles sentidos, los acertijos y la vuelta de tuerca sobre un tema tabú como es el mandato de La Iglesia, su mandato y el cuestionamiento de su origen se hacen protagonistas principales.
Hacía bastante que no me enganchaba con la lectura (desde el verano), pero cuando empiezo a leer algo que me gusta suelo terminarlo muy rápido. Con El Código Davinci me pasó exactamente eso. Lo empecé y en menos de una semana ya me lo había leído.
Quizás se disfruta el hecho de que como está basado en cosas reales y que uno conoce (a pesar de que el autor les encuentre otro sentido) genera más intriga y más expectativa sobre lo que puede llegar a pasar. O tal vez sea que los conocimientos del autor y los que le aportan a uno como lector son tan ricos que uno busca más conocimiento a medida que avanza con la lectura.
Un libro realmente muy recomendable.

Aquellos que lo lean, espero que lo disfruten